



PARANOIA AGENT, de Satoshi Kon (2004)
Una persona va por la calle, profundamente sumida en sus temores, sus odios, sus frustraciones. Se oye un ruido de patines: se atisba un chaval con una gorra de béisbol y un bate doblado por la mitad. Un golpe y todo ha terminado: Shonen Bat se ha cobrado una nueva víctima, la cual tendrá que vivir con ello, y con todo lo de antes.
Este es el planteamiento inicial de Paranoia Agent, la última obra y primera serie de televisión de Satoshi Kon, el director de Perfect Blue, Tokyo Godfathers y la maravillosa Millenium Actress. Kon dice que ha echado en PA todas las ideas sueltas que no pudo meter en sus tres películas, y parece verdad, porque la serie es una mina inagotable. El planteamiento inicial explicado, personas que son atacadas por Shonen Bat y la persecución policial de éste, se agota mucho antes de la mitad de la serie, y los capítulos posteriores, el estilo y el propio Shonen Bat mutan en algo totalmente diferente. Si una virtud tiene esta serie es que es perfectamente impredecible.
La serie es totalmente anárquica, un batiburrillo de ideas que no pretende ser coherente. Algunas le salen bien y otras le salen fatal. Comedia, terror, intriga, melodrama; contado con una multitud de estilos, desde una narración moderna acelerada, hasta un clasicismo contenido muy emocionante. La multitud de líneas de la historia parecen tener como vago nexo común una sátira del Japón moderno, poblado por personajes incapaces de encontrar un lugar para vivir. Kon no deja títere con cabeza, y a veces sutilmente, a veces burdamente, se burla del anime, los móviles, la nostalgia por el Japón antiguo idealizado, los juegos, la educación, la televisión y un largo etcétera.
Tiene una elevada calidad gráfica, casi al nivel de los largometrajes, y un realismo mayor de lo habitual en el estilo de dibujo (¡los japoneses parecen japoneses!

Es terriblemente irregular y algunos capítulos rozan la idiotez, mientras que otros son genialidades. Es tan irritante como Perfect Blue y Tokyo Godfathers, pero en algunos momentos también tan musical como Millenium Actress. Satoshi Kon me recuerda cada vez más a Terry Gilliam: te saca de quicio, pero no podrías vivir sin él.

Además tiene los mejores créditos iniciales de la historia de la televisión.
Son 13 capítulos. Hay varias capturas, dejo aquí la de Anikraze, con sub incrustados en inglés.
175 Mb cada uno.
DavidM