Recuerdo que cuando estaba en clase de dibujo, en 1º de BUP, me mandaron leer una poesía y dibujar en una hora aquello que nos había inspirado.
Era una poesía que trataba sobre la melancolía y la tristeza que se apoderan de uno cuando es abandonado por el ser amado.
Por aquella época solía leer mucho manga y ver mucho anime. Así que sin dudarlo hice una especie de retrato de un personaje con rasgos tipo manga. La verdad es que no me quedó demasiado mal.
Estaba muy ilusionado, y corrí a enseñárselo, inocente de mí, a la profe.
Ella, me miró con cara desconcertada. Y vi como poco a poco se iba transformando en hostilidad y en sorna. Me dijo:
"Me parece ridículo que hagas dibujitos tipo Heidi con una cosa tran profunda como esta".
No es lo mismo... pero bueno
