I say it as well. Eastwood es el cineasta vivo con mayor talla humana. Un saludo

El hijo del antagonista en el fondo es débil: siente la necesidad de fardar de forma patética de gustarle a la hija de (¡por Dios!) su enemigo. Al ver que así no consigue nada, la intenta violar y encima le sale rana y queda como un idiota. Y el caso de Gene Hackman es especialmente conmovedor: "Me estoy construyendo una casa", le dice a Clint. Casa que muestra con orgullo y que representa la vida de una persona con convicciones. No es malvado en absoluto, actúa por convicción. Y el pobre nunca llega a terminarla.Jacob escribió: (no sé dónde ves la humanidad en el personaje que interpreta Gene Hackman o en el hijo del antagonista de el jinete pálido) como un ser egoísta y cruel. Malvado, en esencia.
No lo hace por maldad, sino por debilidad. De hecho, no celebra su acción (cosa que haría una persona malvada), pero tampoco lo lamenta. Es como un niño pequeño: trata de escurrir el bulto. Es bueno que sea así, tan infantil y moralmente inconsciente, pues ilustra los principales defectos del ser humano (vistos a través de una lupa de aumento) por los cuales rara vez puede asumir cierta cantidad de poder sin corromperse.Jacob escribió:Sobre Poder absoluto discrepo totalmente contigo. Ciertamente no la recuerdo bien, pero violar y cubrir la muerte de una mujer no es la mejor manera da presentar a un personaje como ni bueno ni malo, además de que es típico que el presidente sea un tipo honesto que tiene que ceder a las presiones de los jefes de gabinete malos malísimos que les rodean.
No sé si se profesan amor: por algún motivo están juntos; es bueno que la película no sea totalmente explícita en este punto, pues la realidad no lo es, y no es el tema central de la película. No es exactamente un tópico: es algo que sucede continuamente; ancianos adinerados que se casan con chicas jóvenes. Una visión maniquea sería mostrar a la tía complaciendo al anciano por su dinero, y a un anciano que no le importase si ella no le quiere o no, con tal de que se la chupe o de poder enseñarla. El anciano de Poder absoluto tiene una profunda conciencia moral, y trata de ser consecuente y comprensivo con la chica, lo que le lleva paradójicamente a una situación tan innatural como la de la silla.Jacob escribió:El patetismo del colega en silla de ruedas se consigue forzando de manera bestial un tópico que por desgracia a muchos nos parecerá lejanísimo (sobre todo cuando lleguemos a los 60), el viejo casado con la jovecita que está como un queso y la intención de dar satisfacción a sus naturales deseos sexuales permitiendo que se la cepillen otros tipos (época pre-viagra), teniendo como tantra el profundo amor que en el fondo se profesan.
Pues vayan reservándome a la rubia que yo voy pidiendo los botes de 5 Kg. de Viagra.
No es buscando el placer, es puramente amando a su hija. Eso es lo que le hace reprimirse. Y no es maldad, es representar un papel que por su condición social y sus características personales (emocionales: posesivo, carácter fuerte), le sale de forma natural: dominante y controlador hasta extremos violentos. Y es una víctima de esto, que es debilidad de la que, en el fondo, es semi-consciente (le manda dinero a los hijos de aquellos a los que mata).Jacob escribió:¿Por qué tiende a ser destructivo (si eso no es maldad no sé lo que es; la represión por su hija no lo hace más humano, simplemente lo hace igual que el 99% de las personas, que actuamos buscando el placer y eludiendo el dolor) el personaje de Sean Penn en Mystic River?
¿Qué es la venganza sino tomarse la justicia por la propia mano? En realidad esta expresión "tomarse la justicia por la mano" es inexacta, porque pretende determinar la justicia como algo que puede salir de uno de los implicados, lo que virtualmente no es cierto: sólo se asegura la justicia cediendo el juicio de una situación a criterios imparciales, no afectados por ella. Por lo tanto, Penn busca venganza. Penn se ha acostumbrado a vivir desde siempre dominando: sencillamente no SABE ser de otra forma: es como la cruz que tiene tatuada en la espalda. La existencia de su hija le hace aplacar sus impulsos agresivos, eso se ve en la mirada que le echa al novio de ella (el diálogo lo subraya: "¿por qué le odias? Le has mirado como si quisieras matarle"; la misma mirada que echa a Tim Robbins antes de matarlo, cuando su hija ha muerto).Jacob escribió:Puedo coincidir en que la venganza es un impulso natural en una buena parte de seres (quizá sea universal, de hecho), pero no lo es ni de lejos el recurso a tomarse la justicia por la propia mano.
¿Por qué el personaje de Penn tiene la posibilidad (pasado de mafioso o lo que sea) de tomarse la justicia por su mano? ¿Alguno de nosotros la tiene? ¿Busca de alguna manera la aprobación a un comportamiento visceral y poco racional?
Eastwood, lo ha manifestado él mismo en muchas ocasiones, no busca películas con moraleja, busca profundizar en los diferentes aspectos de un tema, considerarlo desde todas sus ópticas: el extremo de ésto ha sido la necesidad de rodar Cartas desde Iwo Jima para narrar la batalla desde el otro lado. No son películas con moraleja, por eso son tan profundas y tan conmovedoras. Cuando Amenábar hizo Mar Adentro perdió una baza tremenda: la de mostrar el lado no partidario de la eutanasia con todos sus motivos, con toda su profundidad. De ese modo perdió una baza del drama: quedó como algo simple, de una pieza. Cualquier narración clásica muestra el choque de dos fuerzas en conflicto, y es importante comprender los dos lados de la cuestión aunque simpaticemos más con uno. Si la película se puede reducir a una moraleja, mal asunto.Jacob escribió:Ese fatalismo que comentas, esa inevitabilidad de ciertos aspectos de nuestras vidas, ¿qué lectura tiene, la de "confórmate con lo que tienes", "no trates de cambiar las cosas", la de "hay que hacer lo que hay que hacer"...? Lo siento pero no puedo evitar realizar esa lectura, que posiblemente Clint no tuviese la intención de hacer en ningún momento.
Todos los seres humanos somos un desastre en algún aspecto. Un personaje protagonista tiene que tener debilidades y problemas, si no, no resultará simpático, y lo que es peor: no tendrá posibilidad de crecer, de madurar. Lo que en guión a veces se denomina "arco".Jacob escribió:Otra cosa, ¿por qué los personajes principales de Poder absoluto o Ejecución inminente son un desastre en sus vidas familiares? ¿Pretende así hacernos ver que su moralidad está alejada del conservadurismo y quizá por ello sus puntos de vista sobre el gobierno y tal van a ser más críticos, anulando de cierta manera una crítica más allá?
Yo los calificaría de "profundizaciones personales". En el fondo son películas sencillas: otra de las virtudes de Clint Eastwood es que cuando le atrae un tema es capaz de sintetizarlo en unos cuantos detalles, y descarta el resto: en Flags se ocupa de la experiencia de la guerra, no en el sentido de competición sino en el sentido de experiencia emocional: la huella que deja en quienes la viven. Lo subraya una y otra vez con la frase (que me encanta): "Quienes han sobrevivido la guerra (vencedores) no quieren hablar de ella" (no recuerdo las palabras exactas, pero eso decía).Jacob escribió:Seguramente no le pondría a algunos de sus films el calificativo de maniqueo en sentido estricto, pero tampoco el de aleccionadores del libre pensamiento, ni tampoco diría que me llevan a la reflexión. Suelo ver en sus películas una porción de realidad que creo cierta y entiendo pero de la que no saco nada más porque no la comparto.
Esto que planteas es muy interesante. A mi entender, buscar siempre el trasfondo social de las acciones conduce, casi siempre, a una visión aleccionadora, moralizante. Clint Eastwood posa la mirada en los conflictos internos de sus personajes, porque son los individuos los que protagonizan las cuestiones vitales y resuelven los problemas morales y filosóficos de su tiempo; la sociedad como ente unitario no existe sino como la suma de sus partes. Como dice Oldsen, la cerrazón en esta perspectiva conduce a la superficialidad y el anacronismo. ¿Por qué podemos encontrar interpretaciones universales en el cine de Mizoguchi o Naruse si parten de una cosmovisión tan distinta de la occidental? Porque su cine aborda los conflictos humanos esenciales, en mi opinión.Jacob escribió:Plantea comportamientos que son, queramos o no, y que seguirán siendo. En la mayoría de los casos sin dejar lugar a la reflexión sobre la verdad de esa inevitabilidad, y por tanto cubriendo las espaldas a los que ejectutan esas acciones y se benefician con ellas. Se preocupa más, como decía Oldsen, por el aspecto humano y deja pasar el aspecto ideológico o social de esas acciones.
Yo opino justamente lo contrario. No me interesan las películas que muestran "las dos caras". Prefiero las películas que se mojan, y que me quieren decir algo. Esa crítica de la película de Amenábar ya la he escuchado en otros sitios, y me parece errónea. Una película hay que valorarla tal cual es, teniendo en cuenta el punto de vista que ha tomado, y ese punto de vista acostumbra a ser único (de hecho eso de quedar "de una pieza" es un elogio para cualquier obra artística). No sé por qué en determinados temas (que podríamos llamar controvertidos) se pide siempre imparcialidad. Me recuerda a la costumbre de pedir exactitud histórica en las películas de época. La imparcialidad y la exactitud son cosa de documentales. Tampoco me parece malo que una película pueda reducirse a una moraleja, casi diría que al revés.Oldsen escribió:Cuando Amenábar hizo Mar Adentro perdió una baza tremenda: la de mostrar el lado no partidario de la eutanasia con todos sus motivos, con toda su profundidad. De ese modo perdió una baza del drama: quedó como algo simple, de una pieza. Cualquier narración clásica muestra el choque de dos fuerzas en conflicto, y es importante comprender los dos lados de la cuestión aunque simpaticemos más con uno. Si la película se puede reducir a una moraleja, mal asunto.
Pero es que mostrar las dos caras de algo no equivale a "no mojarse"; equivale a cerrarse en banda a ver la totalidad del problema. Es quedarse sólo con un lado y suprimir el otro. Lo cual le resta, en mi opinión siempre, crédito al tratamiento. Hay películas que se mojan mucho y no por eso son maniqueas: Matar a un ruiseñor es una película comprometida en el tema del racismo (aunque no creo que sea su tema principal). Eso no le impide ser compleja, antimaniquea y universalmente humana.mesmerism escribió:No me interesan las películas que muestran "las dos caras". Prefiero las películas que se mojan, y que me quieren decir algo.
Para mí lo malo es que se reduzca a una. O a una idea, o a una dirección. Creo que el valor del arte está en cierta apertura que le permite ser re-creado por cada nuevo espectador. Si todo está explicado, si todo está definido en una dirección, la película dejará de interesarme, porque no podré participar en ella (una vez más, Lubitsch).mesmerism escribió:Tampoco me parece malo que una película pueda reducirse a una moraleja, casi diría que al revés.
Me da la impresión de que colabora en sus guiones, orientándolos para favorecer sus intereses. Veo una gran diferencia entre el guión de Crash y el de Million Dollar Baby o Flags of Our Fathers por poner el ejemplo de Haggis. En las dos últimas, se nota con fuerza la presencia de Eastwood desde el mismo planteamiento. En Crash no, y de qué manera.mesmerism escribió:Sobre el cine de Clint Eastwood: hay muchas películas suyas que me encantan (entre ellas Absolute Power y Million Dollar Baby). Pero me gusta sobre todo por su forma de dirigir (seria, eficaz, prácticamente perfecta). Los guiones no son lo que más me llama la atención.
JajajaajjajajaY acusan a mis antepasados franceses de etnocentristas..jajajajja.![]()
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Les habrá echado para atrás el ser una película rodada en japonés, no el hecho de no estar doblada, dado que, si no me equivoco, allí no doblan las películas.cernickalo escribió:¿Por qué, mortimus? Sí, es cierto que a España sólo han llegado 68 copias, pero puedes mirar los datos del box office USA.
Banderas de nuestros padres recaudó en su primer film de semana $10,245,190 y llegó a estar presente en 2.375 salas.
Cartas desde Iwo Jima recaudó en su primer fin de semana (no el de preestreno) $1,696,356, con una difusión máxima en 781 salas.
Parece que el tema de la V.O. también ha echado bastante para atrás al público estadounidense, y eso contando con el reclamo del mayor número de nominaciones a los Oscar y mejore críticas que tenía la segunda.
Saludos.
Claro que les ha echado para atrás el idioma extranjero. La mayoría de los estadounidenses no ven jamás una película en un idioma que no sea el inglés (el caso de Gibson no cuenta, por tratarse de lenguas muertas). De ahí la rapidez con la que hacen remakes de los éxitos recientes europeos o asiáticos, como la reciente The Departed, el próximo estreno de OldBoy o el ya confirmado remake de La vida de los otros (a dirigir por Pollack). Igual les da por hacer un remake de Letters from Iwo Jima y todo.Simkim666 escribió:Les habrá echado para atrás el ser una película rodada en japonés, no el hecho de no estar doblada, dado que, si no me equivoco, allí no doblan las películas.