Tras el triunfo de la Revolución de Octubre, entre otras cosas, es abolida la censura (que volverá más tarde en la práctica –pero al margen de la ley- gracias al “Camarada Stalin”) y se impulsará, aunque tímidamente dado el estado de guerra, la industria cinematográfica.
Lenin, en contexto de la guerra civil que los enfrentaría a los contrarrevolucionarios (comúnmente llamados “blancos”) y consciente de la necesidad de crear una identidad nacional unificada en un país de más de 160 millones de habitantes que hablaban más de 100 idiomas distintos señalará: «El cine es para nosotros la más importante de las artes». Coherentemente con esta tesis, se pondrán medios necesarios para la producción cinematográfica en manos de realizadores jóvenes como Dziga Vertov, cuyos noticiarios Kino-Ojo se exhibirían por todo el país. En obras posteriores como El hombre de la cámara (1929) Vertov y su comontadora Svilova emplearon lentes prismáticas, desvanecidos, sobreimpresiones múltiples, pantallas divididas, tintes, animación, microcinematografía y montaje staccato, alejándose del descripcionismo y entrando en una poesía cinematográfica que buscaba mostrar el espíritu de la revolución y el papel del cine en ella.
Poco más tarde del triunfo revolucionario se nacionalizaría el cine y se adcribiría a la Comisaría de Educación. En 1919 se fundará el Instituto Estatal de Cinematografía o Escuela de Cine de Moscú. Allí, Vertov y Kuleshov establecerían unos principios y prácticas claves del cine soviético de la época.
Por el momento, de las 26 películas que realizó, no he encontrado nada más que estos enlaces que os pongo. A mi juicio, no tiene desperdicio. Tenéis la filmografía en IMDB.
Elinks:
Kino-Ojo (propaganda documental revolucionaria)
El hombre de la cámara: