The Hollywood Ten ( John Berry, 1956) DVDRip VOSE

[by_MaRio]

The Hollywood Ten
(Los diez de Hollywood)
(Usa, 1956) [B/N, 15 m.].
IMDb

Ficha técnica.
Dirección y Guión: John Berry.
Fotografía: Nicolas Hayer.
Productora: The Film Division of the Southern California Chapter, National Council of the Arts, Sciences & Professions.

Intervienen: Alvah Bessie, Herbert J. Biberman, Lester Cole, Edward Dmytryk, Ring Lardner Jr., John Howard Lawson, Albert Maltz, Samuel Ornitz, Adrian Scott, Dalton Trumbo.

Sinopsis: Documental de 1950 que ofrece una mirada cercana sobre los diez guionistas y directores dentro de la lista negra que se negaron a testificar durante los interrogatorios de la HUAC anti-comunista. John Berry, director del documental, también apareció en la lista negra al terminar este trabajo.

Pongo a compartir este interesante corto documental, que viene como extra en el DVD de Espartaco:

the hollywood ten 1956 [XviD.MP3.VO].avi
Tamaño: 102 MB
------------------ Video ------------------
Codec: XviD
Duración: 00h 14m 43s
Resolución: 576 x 432 (1.333 : 1)
Bitrate: 899 kb/s
FPS: 25.000 FPS
Duración: 00h 14m 43s
------------------ Audio ------------------
Codec: 0x0055(MP3) ID'd as MPEG-1 Layer 3
Bitrate: 69 kb/s (34/ch x 2 ch) VBR LAME3.93ad
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imdb

en VO, con subtítulos en castellano e inglés
the hollywood ten 1956 (XviD.MP3.VO).avi

[Huginn]

by_MaRio, ¿podrías hacer una breve sinopsis?

[marlowe62]

Yo compré el año pasado el Dvd con la versión restaurada, pero sin subtítulos (la madre que los p...) y ahora estaba doblemente cabreado al ver la nueva versión.

Asi que este ripeo / me compensa en parte el cabreo (el pareado es a posta).

Muchas gracias Mario.

[pedritus]

Me pongo. vamos a ver de qué va este misterioso documental .
Gracias, Mario.

[bluegardenia]

In 1947 the House of Un-American Activities Committee (HUAC), chaired by J. Parnell Thomas, began an investigation into the Hollywood Motion Picture Industry. The HUAC interviewed 41 people who were working in Hollywood. These people attended voluntarily and became known as "friendly witnesses". During their interviews they named nineteen people who they accused of holding left-wing views.

One of those named, Bertolt Brecht, an emigrant playwright, gave evidence and then left for East Germany. Ten others: Herbert Biberman, Lester Cole, Albert Maltz, Adrian Scott, Samuel Ornitz,, Dalton Trumbo, Edward Dmytryk, Ring Lardner Jr., John Howard Lawson and Alvah Bessie refused to answer any questions.

Known as the Hollywood Ten, they claimed that the 1st Amendment of the United States Constitution gave them the right to do this. The House of Un-American Activities Committee and the courts during appeals disagreed and all were found guilty of contempt of congress and each was sentenced to between six and twelve months in prison.

En cuanto enchufe emule lo pongo a descargar. Gracias

[marlowe62]

La caza de brujas en Hollywood.

“Hacia 1947, la campaña anticomunista capitaneada por el congresista J. Parnell Thomas, había tendido sobre Hollywood un manto tan insidioso como la creciente contaminación de Los Ángeles. Con el Comité de Actividades Antiamericanas garantizándoles la temporada de caza, fanáticos derechistas de Cinelandia hicieron su aparición y, envueltos en la bandera, se lanzaron a un ataque en el que cualquier golpe bajo estaba permitido”. Kenneth Anger, Hollywood Babilonia.

Durante los primeros años de la postguerra, el cine norteamericano continuó mostrando la clara orientación crítica y social que tan buenos resultados había dado en la etapa del New Deal: el drama de la guerra y la inadaptación de los excombatientes (Los mejores años de nuestra vida, William Wyler; 1946); la corrupción en el deporte (Cuerpo y alma, Robert Rossen; 1947. El ídolo de barro, Mark Robson; 1949) y la política (El político, Robert Rossen; 1949), el antisemitismo (Encrucijada de odios, Edward Dmytryk; 1947. La barrera invisible, Elia Kazan; 1947), la marginación de la comunidad negra (Un rayo de luz, Joseph L. Mankiewicz; 1950)...

Esta espléndida corriente crítica fue brutalmente destruida tras la campaña iniciada en 1947 por la Comisión de Actividades Antiamericanas (House Un-American Activities Commitee) auspiciada por el senador Joseph MacCarthy, cuyo objetivo era extirpar la “infiltración subversiva” -comunista- en el cuerpo social de los Estados Unidos, y que desencadenará una auténtica histeria colectiva cuyas víctimas serán algunos de sus intelectuales más prestigiosos.
El cine de Hollywood, al verse bajo el punto de mira de la Comisión, puso en marcha una serie de películas anticomunistas que abre El telón de acero (William Wellman, 1948), pero ésta no se contentó, iniciando una investigación inquisitorial sobre las creencias políticas de los cineastas, que contó con la entusiasta colaboración de los sectores mas reaccionarios, agrupados en torno a una cuadrilla de linchamiento autodenominada “Alianza Cinematográfica para la Preservación de los Ideales Nacionales”, cuyo presidente no era otro que John Wayne, con Charles Coburn y la periodista sensacionalista Hedda Hopper como vicepresidentes -en 1947 Hopper dedicaría sus vacaciones a recorrer los clubs femeninos de los EE.UU. animándolos a boicotear todas las películas en las que interviniesen actores comunistas-, y de la que también formaban parte el director Leo MacCarey y los actores Ward Bond, Robert Taylor, Adolphe Menjou -que declaró que se marchaba a Texas porque “los tejanos no dejarán un sólo comunista vivo”- y Gary Cooper -que se jactaba de haber rechazado “un montón de guiones con ideales comunistas”.

Horrorizados por lo que se avecinaba, los cineastas progresistas, encabezados por Humphrey Bogart, Lauren Bacall, Gene Kelly, John Huston y Danny Kaye, fletaron un avión a Washington para protestar ante el Congreso por “esta invasión para privar a los ciudadanos de los derechos sobre sus ideales o creencias”, sin que les hicieran el menor caso.
Interrogados por la comisión, numerosos miembros de la comunidad cinematográfica se mostraron presa de un auténtico delirio colectivo: la novelista Ayn Rand declaró que la película Song of Russia (Gregory Ratoff, 1944) era mera propaganda roja porque en ella aparecían niños rusos que sonreían; el actor Adolphe Menjou afirmó a su interrogador -el futuro presidente Richard Nixon- que eran comunistas “todas las personas que tienen ideas no americanas”, poniendo como ejemplo a los asistentes a los conciertos del cantante negro Paul Robeson; Lela E. Rogers, madre de la actriz Ginger Rogers, tachó de comunista la película Compañero de mi vida (Edward Dmytrik, 1943) porque el guión había obligado a su hija a decir “El reparto, el reparto justo: esto es la democracia”; el productor Jack L. Warner admitió que su film Humoresque (Jean Negulesco, 1947) contenía propaganda comunista porque en ella John Garfield le comentaba a Joan Crawford “Tu padre es un banquero”, mientras que el suyo sólo poseía una pequeña droguería.
Tras numerosos interrogatorios y largas reflexiones, se llegó a la conclusión de que debían considerarse comunistas todas aquellas películas que criticasen a las personas ricas o a los miembros del Congreso, o que mostrasen a los excombatientes desengañados respecto a su experiencia bélica. Las muchas voces de protesta que se levantaron contra semejante disparate -William Wyler, John Huston, Thomas Mann- fueron acalladas sin contemplaciones por el presidente de la Comisión, J. Parnell Thomas (que, poco más tarde, sería encarcelado por estafa tras descubrirse que se había embolsado los salarios de varios ayudantes ficticios).

Entre todos los convocados por la Comisión, diez se negaron a responder al ser interrogados sobre sus ideas y filiación política; los denominados “Diez de Hollywood”: el productor Adrian Scott, el director Edward Dmytryk, el director y guionista Herbert J. Biberman, y los guionistas Alvah Bessie, Lester Cole, Ring Lardner Jr., John Howard Lawson, Albert Maltz, Samuel Ornitz y Daltron Trumbo que, invocando la 1ª enmienda de la Constitución (1791) -la cual garantiza la libertad religiosa, de palabra y de prensa-, criticaron a la Comisión, negándole el derecho a investigar la ideología y filiación política de los ciudadanos, lo que les valió una condena por “desacato al Congreso” de mil dólares y un año de cárcel en una prisión federal, condena que suponía, además, su despido, a menos que se retractasen ante la Comisión y se mostrasen dispuestos a colaborar, denunciando a los “comunistas” infiltrados en la industria cinematográfica.

[marlowe62]

Herbert J. Biberman. Cineasta norteamericano -productor, director y guionista- (Philadelphia, 1900-New York, 1971).
Hijo de un fabricante de artículos de algodón, trabaja en la empresa familiar durante 4 años. Estudia Economía en la Universidad de Pennsylvania y, en 1925, se matricula en los cursos de arte dramático de George Pierce Barker en Yale, trabajando durante dos años en el Harckness Theatre. Viaja e Europa junto con su hermano Edward y, en la URSS, colabora durante 5 meses en el Meyerhold.
A su regreso a los EE.UU se convierte en ayudante de dirección en una versión de “Fausto” y ve rechazado su intento de representar una obra propia; sin embargo, consigue llevar a las tablas -como director e intérprete-las dos primeras obras soviéticas estrenadas en Norteamérica: “Red Rust” y “Roar China”.
Tras esta larga trayectoria en el teatro, a mediados de los años 30 comienza su carrera cinematográfica en Hollywood como director de películas de serie B para las productoras Columbia, Paramount y RKO: La condesa redentora (1935), su primer film, al que siguen Meet Nero Wolfe (1936) y La raza superior (The Master Race, 1939). Sus primeros pasos como director no son brillantes, y se verá abocado a desempeñar labores de productor y guionista, siempre en películas de bajo presupuesto.
En 1947 rehúsa prestar declaración ante la Comisión de Actividades Antiamericanas (House Un-American Activities Commitee), con lo que se convierte en uno de los “Diez de Hollywood” (Hollywood Ten), siendo condenado en 1950 a seis meses de cárcel por “ultrajar al Congreso” y entrando a formar parte de la “lista negra” (blacklisted) junto a su mujer, la actriz Gale Sondergaard -ganadora del Oscar en 1937 a la mejor actriz de reparto por El caballero Adverse (Anthony Adverse, Mervin LeRoy; 1936)-.
Marginado en Hollywood, dirige en 1954 el drama social La sal de tierra, donde denuncia las penosas condiciones de vida de los mineros chicanos de Nuevo México y que, a pesar del salvaje boicot a fue sometida en los Estados Unidos -la actriz principal, Rosaura Revuelta, acusada de comunista, fue encarcelada y deportada a México durante el rodaje y posteriormente se impidió su distribución en salas comerciales hasta 1965-, obtuvo un gran éxito en Europa, que le consagró como una de las grandes figuras del cine militante.
Desgraciadamente, tras esta obra maestra, Biberman no volvió a dar muestras de su talento. Arruinado, se vio obligado a trabajar como arquitecto, constructor y tasador de terrenos. Su siguiente y última película, el melodrama antiesclavista Slaves (1969) inspirada en la novela “La cabaña del tío Tom”, no pasó de ser un film mediocre que compitió, sin éxito, en el Festival de Cannes de 1969.
En 1965 describió sus experiencias en el rodaje de La sal de la tierra en el libro “Salt of the earth: the story of a film”.

[marlowe62]

Adrian Scott. Productor y guionista norteamericano (1912-1973). A comienzos de los años 40 comienza su carrera como guionista en films como Keeping Company (S. Sylvan Simon, 1941) o Mr. Lucky (H.C. Potter, 1943); posteriormente se convierte en el productor de algunos de los mejores títulos de la primera etapa de Edward Dmytryk: Historia de un detective (Murder, My Sweet, 1944), Venganza (Cornered, 1945) y Encruzijada de odios (Crossfire, 1947). Denunciado por su amigo Dmytryk, es condenado a un año de prisión y tiene que abandonar la producción, realizando tan sólo algunas pequeñas apariciones como actor de reparto.
Edward Dmytryk. Director norteamericano (Canadá, 1908). Nacido en el seno de una familia de emigrantes ucranianos, comienza en 1923 a trabajar para la Paramount como chico de los recados, llegando a jefe de montaje de 1930 a 1939, fecha en que inicia su carrera como director con el melodrama antinazi Hitler’s Children (1943). Logra su primer éxito con Historia de un detective (1944), al que sigue el excelente thriller antifascista Venganza (1945), su obra maestra Hasta el fin del tiempo (1946), y el film de denuncia antisemita Encrucijada de odios (1947) -todas ellas producidas por Adrian Scott-. Tras ser condenado por el CAA marcha a Gran Bretaña y, de regreso a los EE.UU., denuncia a 26 compañeros de profesión, incluyendo a su amigo, el productor Adrian Scott, lo que le permitió volver a dirigir para productores independientes, especialmente con Stanley Kramer: El motín del Caine (1954), Lanza rota (1954), Vivir un gran amor (1955), El baile de los malditos (1958), El hombre de las pistolas de oro (1959)...
Alvah Bessie. Periodista, novelista y guionista norteamericano (1904-1985). En 1938 participa en la guerra civil española como voluntario de la Brigadas Internacionales y posteriomente en la S.G.M. como soldado del ejército norteamericano -experiencias que narraría en su libro “Men in a Battle”-. A mediados de los años 40 es contratado como guionista por la Warner Brothers, obteniendo en 1945 el Oscar al mejor guión por Objetivo Birmania (Raoul Walsh, 1945). Acusado de pertenecer al Partido Comunista, es encarcelado e incluido en la lista negra, por lo que nunca volvió a trabajar en Hollywood -en 1965 refleja estas vicencias en su libro Inquisition in Eden-. En 1968 vuelve a España para participar en el rodaje de España otra vez (Spain again, Jaime Camino; 1968) como coguionista -con Jaime Camino y Roman Gubern- y actor.
Lester Cole. Guionista norteamericano (New York, 1904-San Francisco, 1985). Hijo de unos inmigrantes polacos, comienza su carrera en los años 20 como actor de reparto hasta que, en 1933, firma su primer guión. Activista militante, será uno de los fundadores en 1933 del sindicato izquierdista “Screen Writers Guild”. Entre otros, es autor de los guiones de películas como el western Sendas Siniestras(When the Daltons Rode, George Marshall; 1940), El hombre invisible vuelve (Joe May, 1940), Pacific Blackout (1941), Sangre sobre el sol (Blood on the Sun, Frank Lloyd; 1945) y Objetivo Birmania (Raoul Walsh, 1945). Condenado a un año de prisión por el CAA, no puede finalizar el guión de Viva Zapata (Elia Kazan, 1952), que terminaría firmando John Steimbeck; de hecho, no volvió a figurar en los títulos de crédito a partir de 1947, aunque escribió guiones bajo nombre falso.
Ring Lardner Jr. Guionista norteamericano (Chicago, 1915-Manhattan, 2000). Hijo del humorista Ring Lardner, comenzó su carrera como reportero del New York Daily Mirror, pasando posteriormente a trabajar como publicista en Hollywood para David Selznick, para el que colabora en la adaptación La reina de Nueva York (Nothing Sacred, William A. Wellman; 1937). A partir de entonces emprende una exitosa carrera como guionista: Ha nacido una estrella (A Star Is Born, William A. Wellman; 1937), La mujer del año (Woman of the Year, George Stevens; 1942, por la obtiene el Oscar), The Cross of Lorraine (Tay Garnett, 1943), la obra maestra del thriller Laura (Otto Preminger, 1944), Tomorrow the World (Leslie Fenton, 1944) o Cloak and Dagger (Fritz Lang, 1946). Tras ser condenado a un año de prisión por el CAA, figura en la lista negra hasta mediados de los 60, retornado en films como El rey del juego (The Cincinnati Kid, Norman Jewison; 1965), MASH (Robert Altman, 1970) -por la que obtuvo su segundo Oscar- y The Greatest (Tom Gries, 1977). Es también autor de la novela The Ecstasy of Owen Muir y la obra autobiográfica My family remembered.
John Howard Lawson. Novelista, dramaturgo y guionista norteamericano (New York, 1886-México, 1977). Durante la P.G.M. se traslada a Europa para ofrecer sus servicios como conductor de ambulancias de la Cruz Roja. Tras alcanzar la fama como dramaturgo en los años 20, en 1927 se traslada a Hollywood, contratado por la Paramount, siendo uno de los fundadores de la “Screen Writers Guild”, de la que fue su primer presidente. Colabora en el texto del documental antifranquista Heart of Spain (Paul Strand y Leo Hurwutz, 1937) y escribe los guiones de films como Blockade (William Dieterle, 1938), Volvieron cinco (John Farrow, 1939), Acción en el Atlántico Norte (Lloyd Bacon, 1943), Sahara (Koltan Korda, 1943) o Counter-Attack (Zoltan Korda, 1945). Tras ser procesado por la Comisión de Actividades Antinorteamericanas, pasa un año en prisión y es incluído en la lista negra, por lo que se exilia en México, donde escribió varios libros sobre el oficio de guionista (Film: The Creative Process, 1964) y una reflexión sobre el cine (Film in the Battle of Ideas, 1953).
Albert Maltz. Dramaturgo y guionista norteamericano (Brooklyn, New York, 1908-Los Angeles, 1985). Tras estudiar en la Universidad de Yale, ingresa en la Escuela Dramática de Yale y trabaja como escritor para el izquierdista Theatre Union. En los años 309 se convierte en un dramaturgo de éxito en Broadway y, en 1942, se traslada a Hollywood, donde escribe los guiones de El cuervo (Frank Tuttle, 1942), Destino Tokyo (Delmer Daves, 1944), Pride of the Marines (Delmer Daves, 1945), Cloak and Dagger (Fritz Lang, 1946) y La ciudad desnuda (Jules Dassin, 1948). En 1942 obtiene el Oscar por el guión del documental Moscow Strikes Back y, en 1945, el premio especial de la Academia por el de House I Live In. Condenado a un año de cárcel e incluido en la “lista negra” -era, probablemente, el más situado a la izquierda de los Diez de Hollywood-, continuó trabajando bajo nombre falso y tuvo que esperar hasta 1970 para que su nombre volviera a aparecer en los títulos de crédito de Dos mulas y una mujer (Don Siegel, 1970).
Samuel Ornitz. Novelista y guionista norteamericano (New York, 1891-1957). En 1923 publica la novela Haunch Paunch and Jowl sobre la vida de los inmigrantes judíos. En 1929 se instala en Hollywood, donde trabaja para RKO y Republic y se convierte en uno de los miembros más activos de los medios izquierdistas y organiza la “Screen Actors Guild”. Acusado de pertenecer al Partido Comunista por el CAA, es condenado a un año de prisión -que aprovecha para escribir su mejor novela, Bride of the Sabbath- y se ve obligado a abandonar su carrera cinematográfica, dedicándose a la literatura hasta su muerte.
Dalton Trumbo. Seudónimo de James Dalton (Montrose, Colorado, 1905-Los Angeles, 1976). Tras comenzar sus pasos como reportero y editor periodístico, inicia su carrera cinematográfica a mediados de los años 30 y, durante la S.G.M. se convierte en un guionista de éxito, con títulos como Espejismo de amor (Sam Wood, 1940), Dos en el cielo (Victor Fleming, 1943) o Treinta segundos sobre Tokyo (Mervin LeRoy, 1944). La condena del Comité le cierra las puertas de los estudios, pero sigue escribiendo decenas de guiones con un nombre falso, lo que le vale incluso ganar un Óscar bajo el seudónimo de Robert Rich por El Bravo (Irving Rapper, 1956). En 1960 sale de nuevo a la luz gracias al apoyo de Kirk Douglas (Espartaco, Stanley Kubrick; 1960) y Otto Preminger (Éxodo, 1960) y puede reemprender abiertamente su carrera: El último atardecer (Robert Aldrich, 1961), Los valientes andan solos (D. Miller, 1962), Castillos en la arena (Vincent Minelli, 1965), El hombre de Kiev (John Frankenheimer, 1968)... En 1970 dirige su primer y único film, Johnny cogió su fusil, adaptación de su novela del mismo nombre escrita en 1939.

[marlowe62]

Este clima inquisitorial se exacerbó durante la guerra de Corea, dando lugar a sucesos verdaderamente esperpénticos: el director Robert Rossen, que había huido a México, terminó colaborando con la Comisión y delatando a varios compañeros; Jules Dassin veía como, un día antes de comenzar el rodaje de “El enemigo público nº 1" (1953), la actriz Zsa Zsa Gabor -agente al servicio del FBI- se negaba a trabajar a sus órdenes, por lo que fue reemplazado por Henri Verneuil; Edward Dmytryk, al ser nuevamente interrogado en 1951 admitió haber pertenecido entre 1944 y 1945 al Partido Comunista Norteamericano y denunció a 26 antiguos camaradas. Idéntica postuda adoptaron los directores Elia Kazan y Frank Tuttle, el actor Sterling Hayden y los guionistas Budd Schulberg y Martin Berkeley -que batió todo un récord denunciando a 172 personas-, lo que les permitió ser rehabilitados por la Comisión y las empresas productoras. Finalmente, en 1951 la Comisión pudo completar una “lista negra” con 324 nombres, a los que los productores, reunidos secretamente en el Waldorf Astoria, se comprometieron a no dar trabajo mientas no fuesen depurados por un Clearing Office creado al efecto.
Los más afectados fueron los actores, incapaces de cambiar de apariencia, y que se vieron de repente excluídos de los platos: Larry Parks, Anne Revere, Gale Sondergaard, Jean Muir, Will Geer o John Garfield, que se suicidó en 1952. Por contra, los guionistas tuvieron mejor suerte, ya que las pequeñas compañías, que antes no habían podido contar con ellos a causa de sus elevados salarios, se apresuraron a ofrecerles trabajo, siempre bajo nombre supuesto y a precio de saldo. En cuanto a los directores, algunas de las más grandes figuras del cine optan por exiliarse en Europa: Charles Chaplin, Orson Welles, Jules Dassin, Joseph Losey , John Berry... que, en general, demostraron lejos de Hollywood sólo en contadas ocasiones su talento. Finalmente, tras el fin de la guerra de Corea (1953) y el voto de censura contra el senador McCarthy (1954), la influencia de las comisiones y el celo inquisidor disminuyó pero, para muchos cineastas, su carrera quedo definitivamente truncada.

Redacté este texto hace un par de años para un cineforum sobre "La sal de la tierra" de Biberman. Espero que su lectura no resulte aburrida, en caso afirmativo, recomiendo que os bajéis el documental, porque una imagen vale mas que mil palabras (nunca mejor dicho).

[Gawyn]

Me apunto. Es un tema muy interesante, un antecesor de la actual obsesión por la seguridad de los yankees...

Muchas gracias y un saludo.

[by_MaRio]

by_MaRio, ¿podrías hacer una breve sinopsis?

magnífica la exposición de marlowe; el documental en sí está protagonizado por los propios 10 (tras una introducción donde se cuenta quién es cada uno de ellos), explicando las razones de su actitud ante la Comisión "en caliente", poco antes de su ingreso en prisión,
merece la pena echarle un vistazo

[Huginn]

Pa'bajo Mucha gracias

[figure8]

Sip, interesante Mario. Le hago un hueco en cuanto pueda.

[KeyserSoze]

Bajada tb.

Marlowe, imaginate si esta bien redactado que he dejado de ver el basket por leerlo. Muy interesante.

Gracias a ambos.

[vishnu25]

Puesto a bajar tambien, clicke ayer sin saber ni que era jejeje

Saludos

[barkos]

Bajando, interesante. ¿Pero que tiene que ver este documental con la pelicula Espartaco para que la metan como extra?

[xaniox]

Puesto a bajar también. Gracias Mario.

¿Pero que tiene que ver este documental con la pelicula Espartaco para que la metan como extra?

Imagino que será porque tiene de guionista a Dalton Trumbo, uno de los damnificados de más renombre de la "caza de brujas".

Salu2

[HariSeldon]

Pues no me ha dado tiempo a informar que la habia pinchado, ayer la puse a descargar y hoy ya esta completa


Un salduo y gracias

[by_MaRio]

Bajando, interesante. ¿Pero que tiene que ver este documental con la pelicula Espartaco para que la metan como extra?

Te copio la expicación que da el propio DVD.

Espartaco y la Lista Negra
De acuerdo con la versión de su estrella y productor, Kirk Douglas, Espartaco fue la primera película producida en Hollywood cuyos títulos de crédito incluían abiertamente a un guionista de la lista negra. (Técnicamente, Rififi, realizada en Francia en 1955 por el exiliado de Hollywood Jules Dassin, que se proyectó en EEUU en 1956, precedió a Espartaco mostrando en pantalla, en los créditos, a Dassin, él mismo un realizador incluido en la lista negra). Según el New York Times, el anuncio de Otto Preminger de que Trumbo figuraría como guionista de Ëxodo se produjo ocho meses antes que la decisión de Douglas.

Douglas se reunió con Kubrik y con el productor Edward Lewis para decidir el nombre del guionista de Espartaco que aparecería en pantalla. En un principio, el guión se atribuyó a “Eddie Lewis y Sam Jackson”; Douglas dijo que de eso, nada, y a la mañana siguiente, había en Universal un pase a nombre de Trumbo, quien por primera vez en diez años pudo entrar en unos estudios. “Gracias, Kirk”, dijo, “por devolverme mi nombre”. El desafío combinado de los creadores de las películas más importantes del año, en dos de los principales estudios de Hollywood, marcó el fin de la lista negra, pero cuando Espartaco se estrenó en junio de 1960, la columnista Hedda Hopper promovió un boicot; y la Legión Americana atacó a Douglas, enviando una carta a diecisiete mil secciones locales de la organización de excombatientes más grande del mundo, que decía “¡NO VEÁIS ESPARTACO!”. La carta esbozaba la base de la protesta de la Legión contra “la renovada invasión del mundo norteamericano por parte de artistas adoctrinados en la Unión Soviética”. La carta fue considerada parte de una “guerra de información” y revela algunas de las dificultades a que se enfrentaban Espartaco y sus realizadores.

Por suerte, el presidente Kennedy salió a hurtadillas de la Casa Blanca para ver la película e hizo saber que le había encantado.

[Zitor]

Con unos días de retraso también me apunto

Gracias