ESTOY TOTALMENTE EN CONTRA DE LOS SUBTÍTULOS
...lo que pasa es que estoy mucho más en contra de los doblajes.

;)
Claro, lo ideal séría dominar todos los idiomas habidos y por haber, pero como no es el caso, pues los subs son el mal menor.
En serio, a mí me gusta oír la actuación de los actores. Si no, ¿cómo puede decir alguien que tal actor o tal actriz "ha estado muy bien", o "qué bien trabaja" y todo eso?
Además, por mucho que hoy día haya diversas pistas de audio, el doblaje suena en muchos casos a algo plano y superpuesto (que al fin y al cabo es lo que es).
Por no hablar de que los dobladores son cuatro mal contados (a la mayoría de los cuales conocemos en Catalunya por trabajos ante las cámaras) y siempre imprimen sus tics (a veces insufribles).
¿Ejemplos? Así a bote pronto, el que suele doblar a Tom Cruise, Tom Hanks, Kenneth Brannagh, Robin Williams, Nicolas Cage, Sean Penn... es un mismo tío.
También De Niro, Stallone, Hoffman y Pacino comparten voz.
Y otro que sale hasta en la sopa (de hecho se harta a hacer anuncios) es el de Marlon Brando, Jack Nicholson, Paul Newman o Michael Caine.
Otro del que es imposible escapar es la voz habitual de Jack Lemmon: no hay peli moderna (pese a que ya debe de tener una edad) en la que no salga, oye. Lo mismo que el doblador de David Schwimmer (Ross en Friend)s. O el de Martin Lawrence, que también doblaba al poli prota de Cosas de Cosa (está especializado en actores negros graciosillos, por lo visto, aunque también dobla a Banderas).
Uno del que ahora mismo no recuerdo ningún actor doblado, pero que siempre hace papeles secundarios es Carles Canut, y no puedo con él, de veras, como tampoco soporto a Pep Sais.
Y en cuanto a mujeres, a nadie con un poco de inquietud en la materia puede habérsele escapado que la voz femenina por excelencia en estos últimos años (tanto en pelis y series como anuncios, es la de Courteney Cox (Monica en Friends).
Con la versión original, además, si tienes conocimienos de la lengua en cuestión, puedes captar juegos de palabras o referencias culturales que al adaptarse pierden su gracia.
Total, que ODIO el doblaje. Y me gusta apreciar el trabajo interpretativo, pero de los que están en pantalla.
Y como ya se ha dicho, es cuestión de acostumbrarse. Yo ni me entero de que estoy leyendo, en serio. De hecho me meto mucho más en la película así que con el doblaje. Serán manías mías, pero...